En las sesiones del Método Feldenkrais y en las clases de Pilates es necesaria la empatía. La definición de empatía sería algo como, ponerse en la piel de otro. Suena fácil, verdad? Pero no lo es. Muchas veces tenemos la oportunidad de practicarlo y no sabemos porque pero nos da pereza.
En todos aquellos trabajos relacionados con el aprendizaje, es básico.
Que difícil es aceptar un fallo, en mi trabajo es algo habitual y cotidiano observar a las personas hacerlo y entonces intentar enseñarles a vivir este momento desde un lado positivo. Yo le llamo etiquetar y luego justificar, “Bueno ya sabes, esta es mi pierna mala” el fallo simplemente es el síntoma de que algo pasa, y no tiene por que ser siempre negativo. Dentro de un aprendizaje debe existir el fallo y casi siempre después viene el OK!! lo has logrado, lo ves!! En el fondo ya lo sabías, pero las dudas y el miedo al error nos hace frágiles e inseguros. Si alguna vez sin prever surge algún fallo, tómalo como parte del aprendizaje y no del fracaso ¿Como podemos medir que es lo que esta bien o mal, normal o no? No es que este mal, solo que si quieres puedes mejorar. Si dejas de aprender dejas de vivir.
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